NO ME LEAS



NO ME LEAS

Así funciona la primera ley fundamental de seducción. Yo te digo que no me leas, y aquí estás. Pero es que si voy a más y te digo que no te interesa nada de lo que te voy a contar, que esto no es para ti y que lo dejes ahora mismo seguirás atado a estas líneas hasta que las acabes. Porque si me haces caso y no lo lees, las dudas te asaltarán (¿y si al final decía algo interesante? ¿y si en realidad era para mi? ¿y si no lo era, qué les dice a los demás?
¿y por qué ha considerado que no era para mi?) y serán mucho más difíciles de soportar que el tiempo que tardarás en leerme.


Risto Mejide


24 de octubre de 2012

(11 de septiembre emocional)

Me estallas aquí (entre mis cejas). Mi cabeza inundándose más rápido que los camarotes del Titanic; los músicos dejaron de tocar hace un tiempo en mi cubierta, (nos dan por perdidos). Fukushima por mis venas, (devastadora fusión del núcleo). Todo este cuerpo blandengue y vulnerable es el Auschwitz que nos ha quedado. Me levanto. Inicio el ritual en el que me fumo un cigarrillo y tacho en el calendario (con una mezcla incomprensible de saña y abatimiento) el día que inicio.

1 comentario:

N Ó M A D A dijo...

Hay días así. En los que todo estalla, resuena o rebota.
Sigues ahí?
Saludos!