NO ME LEAS



NO ME LEAS

Así funciona la primera ley fundamental de seducción. Yo te digo que no me leas, y aquí estás. Pero es que si voy a más y te digo que no te interesa nada de lo que te voy a contar, que esto no es para ti y que lo dejes ahora mismo seguirás atado a estas líneas hasta que las acabes. Porque si me haces caso y no lo lees, las dudas te asaltarán (¿y si al final decía algo interesante? ¿y si en realidad era para mi? ¿y si no lo era, qué les dice a los demás?
¿y por qué ha considerado que no era para mi?) y serán mucho más difíciles de soportar que el tiempo que tardarás en leerme.


Risto Mejide


15 de enero de 2009

policía

La última vez que lo vi estaba en el bar de alcohólicos anónimos. En plena terapia. Olía a berberecho rancio y parecía un ganchito tras el fin de una fiesta. Esparcido y desorientado. Consumía Beatriz con hielo en un vaso lánguido y hablaba con las colillas de un cenicero que presidía la mesa. Los cigarros estaban desnudos, había pasado demasiado tiempo. Aún así, borracho de ella, le sometió a un tercer grado sin adquirir respuesta alguna. Apenas pude oírle balbucear cuatro palabras heridas entre sollozos. ''La próxima vez mátame tu primero''

No hay comentarios: